domingo, enero 08, 2006

Cortando por lo sano

Estoy en Córdoba, en casa de unas amigas. Vine porque ya no daba más ni del corazón ni del calor en mi ciudad.
Unos días de descanso me vendrán muy bien. No traje la compu portátil, así que sólo hoy me puse a borrar unos mails, y hago este aviso. Nada de cybers ni locutorios. Verdes, aire, y tranquilidad mental.

9 comentarios:

VIOLETA dijo...

las amigas son nuestra ultima salvación.
Vamos....oxigenemos todo
Fuerza!

Diego Gutiérrez dijo...

Córdoba debe de ser preciosa... a ver cuando puedo ir a Argentina...

Anónimo dijo...

que descanses y te oxigenes estos dias.....un beso

Diego Gutiérrez dijo...

Realmente te fuiste y no volviste...
DG

Enamorada de las simples cosas de la vida... dijo...

hola me llamo jamile te felicito por tu blog, espero que sigas poniendo cosas tan interesantes como las que ya tienes, salu2 y besosos te deseo lo mejor
pd:visita mi blog si lo deseas http://jamilenahid.blogspot.com/

Nesk dijo...

Ei, espero que la tranquilidad te vaya bien.

Anónimo dijo...

ella se fue lejos tambien, recorre alturas milenarias junto a sus amigas....ella esta sufriendo por mi, yo sufro por ella.........no entiendo las motivaciones que gobiernan mis actos....no entiendo porque cuando creemos alcanzar una vida...es la misma vida la que nos sorprende para iniciar de cero.


Puedo escribir los versos más tristes esta noche.
Escribir, por ejemplo: "La noche está estrellada,
y tiritan, azules, los astros, a lo lejos".
El viento de la noche gira en el cielo y canta.
Puedo escribir los versos más tristes esta noche.
Yo la quise, y a veces ella también me quiso.
En las noches como ésta la tuve entre mis brazos.
¡La besé tantas veces bajo el cielo infinito!
Ella me quiso, a veces yo también la quería.
¡Como no haber amado sus grandes ojos fijos!
Puedo escribir los versos más tristes esta noche.
Pensar que no la tengo. Sentir que la he perdido,
Oír la noche inmensa, más inmensa sin ella.
Y el verso cae al alma como al pasto el rocío.
Qué importa que mi amor no pudiera guardarla.
La noche está estrellada y ella no está conmigo.
Eso es todo. A lo lejos alguien canta. A lo lejos.
Mi alma no se contenta con haberla perdido.
Como para acercarla mi mirada la busca.
Mi corazón la busca, y ella no está conmigo.
La misma noche que hace blanquear los mismos árboles.
Nosotros, los de entonces, ya no somos los mismos.
Ya no la quiero, es cierto, pero cuánto la quise!
Mi voz buscaba el viento para tocar su oído.
De otro. Será de otro. Como antes de mis besos.
Su voz, su cuerpo claro. Sus ojos infinitos.
Ya no la quiero, es cierto, pero tal vez la quiero.
Es tan corto el amor, y es tan largo el olvido.
Porque en noches como ésta, la tuve entre mis brazos,
mi alma no se contenta con haberla perdido.
Aunque éste sea el último dolor que ella me causa,
y éstos sean los últimos versos que yo le escribo.

Anónimo dijo...

Oye usuario anónimo anterior, cuando se escribe un poema hay que adjuntar el nombre del autor !!!!!
Te faltó poner Pablo Neruda.

Anónimo dijo...

Además es "titilan los astros a lo lejor" NO Tiriritan.