- Hola?
- ¿Hablo con la Sra. “... ...”.
- Sí, ella habla.
- Hola, soy “... ...”. No sé si me recuerda.
- Sí, cómo no!
- Creo que además le deben haber contado una charla que tuve con una personita muy especial(sic)anoche.
- Sí, sí. Esta madrugada.
- Me alegra que sea usted quien está con Melisa.
- ¿Se alegra?
- Me alegro y tranquilizo. Usted es de confianza!
- Mire que en las relaciones humanas se muestran otras facetas.
- Sí, puede ser. Pero hágame un favor...
- Si puedo.
- Cuídela a Melisa. Ya sabe cómo es este “mundo”. Hay mucha gente de mierda.
- Ehh, sí. Creo que nos cuidamos las dos.
- Pero ella es muy pichona, o al menos me parece. No sé. Quizá no conozco bien a mi hija.
- Es una persona muy madura, y amorosa.
- Sí, claro.... Bueno, espero no haberla molestado...
- Para nada.
- Ya la llamaré por alguna otra actividad.
- Cuando guste.
- Gracias y hasta pronto.
- Chau, de nada.
Fuegos cruzados. Eso es lo que surge de las salidas de closet. Pero no esperaba recibir una ráfaga tan pero tan rápido!
jueves, junio 02, 2005
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5 comentarios:
Vaya...si que es pequeño el mundo...
No se como reaccionaria yo si me pasara eso!!
Por lo menos ya cuentas con alguien que te apoya como pareja de su hija!! eso es toda una suerte..
A mi me parecio una muy buena llamada, como dijo purkinje, tienes el apoyo de la madre, que bien !
Del padre. Tiene el apoyo del padre.
eeeh, has tenido mucha suerte! creo.. anda q si ahora tienes la suegra encima para hacer mil "acrividades"!
un beso!
Igual me parece una muy buena llamada ;)
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